La dificultad de llegar a pactos amenaza con hacer Cataluña ingobernable

Xavi Gual BARCELONA / E. LA VOZ

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De izquierda a derecha en la imagen, Laure Vega (CUP), Alejandro Fernández (PP), Carlos Carrizosa (Ciutadans), Salvador Illa (PSC), Pere Aragonès (ERC), Ignacio Garriga (Vox), Josep Rull (Junts) y Jéssica Albiach (Comuns Sumar) durante el debate en La Sexta.
De izquierda a derecha en la imagen, Laure Vega (CUP), Alejandro Fernández (PP), Carlos Carrizosa (Ciutadans), Salvador Illa (PSC), Pere Aragonès (ERC), Ignacio Garriga (Vox), Josep Rull (Junts) y Jéssica Albiach (Comuns Sumar) durante el debate en La Sexta. La Sexta

Los candidatos evidencian la falta de consensos para articular mayorías

07 may 2024 . Actualizado a las 08:40 h.

Cataluña se asoma a un posible escenario de bloqueo y de repetición electoral por los vetos cruzados entre los diferentes candidatos a la presidencia de la Generalitat, tal como se pudo ver anoche en El Debat de La Sexta. En un plató de 1.200 metros cuadrados, escenario de las últimas ediciones de Operación Triunfo, sin atriles, los cabezas de lista de las ocho formaciones con presencia parlamentaria, menos Carles Puigdemont que lo vio desde Argelers, midieron sus fuerzas a cinco días de la cita con las urnas, en unas elecciones que son cruciales también para la gobernabilidad de España.

Sin mayorías claras en el horizonte, de los ocho en liza solo tres tienen opciones reales de ocupar el palacio de la Generalitat: Salvador Illa, por el PSC; Carles Puigdemont, por Junts; y el actual inquilino, Pere Aragonès, por Esquerra. El más aventajado en los sondeos es el candidato socialista, si bien es el que a priori lo tendrá más complicado para articular una mayoría de gobierno, tal como se evidenció ayer en el Parque Audiovisual de Cataluña, en Tarrasa (Barcelona).

Rompió el hielo el candidato del PSC, a quien Ana Pastor le preguntó si pactará o no con Junts. «Hay dos posibles escenarios en Cataluña; uno, seguir con más de lo mismo, con el bloqueo, con la confrontación, lo que hemos tenido en esta legislatura, inestabilidad; o abrir un nueva etapa de diálogo, para que Cataluña avance». Le insistió Pastor, «¿pero pactará o no con Junts?». A lo que respondió: «Primero, dejemos que los catalanes hablen, luego hablaremos. Yo le digo que voy a dar un paso al frente para presentarme a la investidura, la pregunta es si los demás me van a bloquear o no».

Pastor siguió con Alejandro Fernández, del PP, a quien interrogó sobre si el socialista recibirá el apoyo de los populares, al estilo Collboni en Barcelona. «Fue hace cinco o seis días que el propio Illa descartó los votos del PP; el señor Illa tiene a Puigdemont y a ERC como socios preferentes», señaló Fernández antes de encararse directamente con el candidato del PSC: «Usted se presentó a las últimas elecciones jurando que jamás apoyaría al separatismo y ha dicho sí a todo a Esquerra y juró en las generales que no apoyaría la amnistía. Usted no le dice la verdad ni al médico». A lo que el socialista replicó que «el presidente de Cataluña se decide en Cataluña».

El candidato a la reelección, Pere Aragonès, de Esquerra, aconsejó humildad a Illa: «Usted dice que se va a presentar a la investidura en cualquier caso; vigile que no se le vaya a quedar cara de Feijoo, porque le recuerdo que al presidente de la Generalitat lo elige una mayoría de parlamentarios». Aragonès, eso sí, insistió en que «sí habrá referendo» pactado. Por su parte, Jéssica Albiach dejó claro que el único veto de los comunes es hacer presidente a Puigdemont.

 Volver al 2017

Uno de los momentos más tensos lo protagonizaron Josep Rull y Alejandro Fernández, cuando el popular recriminó al de Junts que se propongan volver al 2017, el año del referendo del 1-O y la declaración unilateral de independencia. Tras mencionar al exministro del Interior Jorge Fernández Díaz, Rull le espetó: «Las cloacas del Estado son ustedes». 

Las culpas, a Montilla

La sequía fue otro de los asuntos que levantó más polvareda. Salvador Illa apostó por la construcción de desaladoras para que las cuencas internas catalanas puedan autoabastecerse, descartando un trasvase del Ebro, la solución propuesta por el PP y Vox. Rull rechazó las críticas de inacción en esta materia cuando gobernaban, asegurando que el tripartito de izquierdas de José Montilla dejó «devastadas» las cuentas de la Generalitat, lo que les impidió llevar a cabo «reformas estructurales» para solventar un problema que no es nuevo.

Carlos Carrizosa, de Ciutadans, fue el más beligerante con la ley de amnistía para los implicados en el procés, cargando contra Garriga, el candidato de Vox, al que afeó que «en sus manifestaciones llaman al rey Felpudo VI y recortan la corona de España».

Por su parte, Garriga centró sus intervenciones en relacionar seguridad con inmigración. Y aprovechó para preguntar a los demás líderes qué opinan de que un 78 % de los detenidos en el 2022 y 2023 hayan sido extranjeros, según aseguró. El debate abordó también el modelo de financiación. «No tiene lógica que se suban impuestos para que la señora Ayuso los baje en Madrid», lamentó el número tres de Junts. Illa, por su parte, aseguró que pretende eliminar la competencia fiscal «después de que en 10 años no se haya hecho nada»