Texto de análisis
30 abr 2024 . Actualizado a las 23:44 h.Era, por motivos obvios, el futbolista más destacado y pretendido del grupo asturiano de Tercera RFEF. El delantero centro de la UD Llanera, Amadou Coundoul, será a partir de la próxima temporada nuevo futbolista del Real Sporting de Gijón. El atacante senegalés de 21 años -cumplirá 22 en mayo- se enrolará en un inicio en el segundo equipo rojiblanco, el Sporting Atlético, con un contrato de 2 años en el conjunto filial + 2 en el primer equipo.
Cabe destacar un par de aspectos clave a considerar en el acuerdo, que ya es total con club y jugador: por un lado, Amadou realizará la pretemporada con el primer equipo, por lo que tendrá su oportunidad para poder hacerse un sitio a su llegada, mientras que por otro, su condición de sub-23 únicamente aplicará al primer año de contrato, por lo que sólo en la 24/25 podrá alternar y jugar con el primer y segundo equipo. En la 25/26, si bien inicialmente tendría contrato con el Sporting Atlético, en caso de jugar con el primer equipo ya no podría bajar de nuevo al segundo al no ser sub-23.
Esta circunstancia es un pequeño asterisco en su contratación para el próximo curso, pero el Sporting ya trató de cerrar su fichaje el pasado verano, antes de que se produjera su gran irrupción goleadora de esta temporada (28 goles en 31 partidos de liga, siendo máximo goleador nacional en Tercera). Por aquel entonces, habiendo un preacuerdo con el jugador, finalmente la operación no se concretó, a pesar de haber informes positivos del delantero senegalés desde la campaña anterior, previa a la llegada de Orlegi a la dirección del club.
En dichos informes se destacó su mayor virtud, que reside en todo lo que tiene que ver con el físico. Un delantero referencia con mucha presencia en el área y a su vez con amenaza al espacio desde su gran zancada. Un perfil que «no hay en Mareo» y que esta temporada ha descorchado en el aspecto goleador, asentado sobre todo en su olfato para ocupar zonas de finalización y su potente disparo, siendo diestro como pie dominante, pero pudiendo acabar las jugadas también con la zurda y haciendo gala de diversos recursos para finalizar. A lo que sumar su poderío en el juego aéreo con una estatura de 1,94 metros.
A pesar de ello, también tiene margen de mejora en lo físico en aspectos como el salto o la musculatura, algo que en una estructura de un club profesional como el Sporting puede desarrollar con mayor facilidad. Algo similar ocurre en el aspecto táctico a la hora de entender e interpretar el juego, siendo un futbolista joven con apenas experiencia en Tercera y Segunda RFEF. Dos cuestiones en las que, como aseguran en su entorno, podrá crecer y mucho en un club con la dimensión y los medios del Sporting.
Si bien tiene un buen juego de espaldas para dar continuidad a las jugadas actuando como referencia, apoyado en su capacidad para ganar en el duelo físico, es un delantero que interviene poco en el juego y que tiene un amplio margen de mejora en el aspecto técnico, sobre todo en sus primeros contactos, aunque ha mostrado ser un futbolista con recursos también a un toque en el interior del área, es lejos de la misma donde más se le pueden complicar este tipo de acciones más elaboradas.
En definitiva, un proyecto de futbolista joven, que ha demostrado esta temporada su capacidad de cara a gol y que tiene un amplio potencial más allá del acierto de cara a puerta de esta campaña que en Mareo no pasó desapercibido tiempo atrás. Un perfil necesario y que buscará continuar con su desarrollo en la estructura rojiblanca.