Las masivas protestas universitarias no cambian el apoyo de Biden a Israel

Miguel Palacio NUEVA YORK / E. LA VOZ

ACTUALIDAD · Exclusivo suscriptores

Biden, durante un discurso en la Casa Blanca convocado de urgencia ante las protestas en las universidades.
Biden, durante un discurso en la Casa Blanca convocado de urgencia ante las protestas en las universidades. Nathan Howard | REUTERS

La policía entra en los campus para reprimir las manifestaciones propalestinas

03 may 2024 . Actualizado a las 10:51 h.

De costa a costa de Estados Unidos, las manifestaciones en las universidades contra la guerra en Gaza continúan creciendo en intensidad. Una escalada que ha llevado al presidente Joe Biden a abordar por primera vez la cuestión. En una breve comparecencia en la Casa Blanca, Biden condenó la violencia de las protestas universitarias, aunque defendió el derecho a protestar. No obstante, ante las preguntas de los periodistas, reiteró que no cambiará su política en Oriente Medio, en definitiva su apoyo a Israel.

Intentando trazar una línea entre las protestas pacíficas y las violentas, el presidente hizo hincapié en que «existe un derecho a protestar, pero no a crear el caos». «Debe prevalecer el orden», dijo ante los disturbios registrados en los campus de todo el país. Y remarcó que las protestas deben tener lugar «sin destrucción, sin odio y dentro de la legalidad».

A lo largo de esta semana, las cargas policiales contra las acampadas propalestinas se han propagado por buena parte del país, motivando reacciones de los dos principales candidatos a la Casa Blanca e inspirando la aprobación de un proyecto de ley contra el antisemitismo la noche del miércoles en la Cámara de Representantes. La propuesta, que facilitará a los federales reprimir las protestas en los campus, recibió 320 votos a favor y 91 en contra (los de 70 demócratas del ala más progresista y 21 republicanos).

«Lunáticos furiosos»

Biden hace equilibrios para no acabar con el apoyo de los jóvenes, consciente de que los necesita si quiere ganar las elecciones presidenciales. Mientras, Donald Trump no perdió la oportunidad de cargar contra los manifestantes, a los que calificó de «lunáticos furiosos» y, sin aportar pruebas, sugirió que podrían estar financiados por «grupos liberales» para quitar el foco informativo de la crisis migratoria que vive el país.

La policía desalojó el campamento propalestino en el campus de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) en una operación en la madrugada local que se cerró con más de un centenar de detenidos. La actuación policial tuvo lugar después de que la noche anterior, un grupo de contramanifestantes proisraelíes intentasen desalojar a los propalestinos. Un intento en el que, además de enfrentarse cuerpo a cuerpo, hicieron uso de proyectiles y agentes químicos. Todo, ante la pasividad de los policías, que tardaron horas en intervenir.

La represión de las protestas eleva hasta cerca de 2.000 el número de detenidos en dos semanas. El descontento estalló la semana pasada, cuando la presidenta de la Universidad de Columbia, Nemat Shafik, pidió a la policía desalojar a los manifestantes del campus. y del edificio Hamilton Hall. Un edificio centenario que ha sido epicentro de las protestas universitarias a lo largo del último medio siglo.

En 1968 y 1972, el Hamilton Hall fue ocupado por manifestantes contra la guerra de Vietnam y, en 1985, contra el apartheid de Sudáfrica. Ahora, los manifestantes exigen a la universidad cortar sus vínculos con empresas que suministran armas y equipo militar al Ejército israelí.